Axel Rionegro, que juega en el club Old Georgian de Quilmes, vio a un contrincante tirado en medio de la cancha y lo asistió rápidamente para que pudiera respirar.
En un partido de la Unión de Rugby de Buenos Aires (URBA), un jugador de un club de Quilmes le salvó la vida a un rival que había perdido el conocimiento en medio de la cancha, donde lo vio tirado en el piso con “los ojos blancos” y expulsando “saliva” tras sufrir un fuerte golpe en la cabeza, situación ante la que atinó a “sacarle el bucal” para que no se ahogue.
En el rugby, la camaradería está garantizada en el famoso “Tercer Tiempo”, instancia post partido en la que los contrincantes se encuentran para compartir una bebida y una comida . Sin embargo, Axel Rionegro, un joven oriundo de Berazategui, demostró que dentro de la cancha también hay valores que están por encima de la rudeza que exige ese deporte.
La dramática secuencia ocurrió durante un enfrentamiento entre el equipo de Axel, Old Georgian de Quilmes, contra Club Padua, en el certamen organizado por la URBA. Durante un ataque del equipo quilmeño, cuando sus compañeros se acercaban al ingoal rival, Axel, advirtió que un jugador del otro equipo, identificado como Gonzalo Suárez, estaba tirado en el césped sin conocimiento. En ese momento, no lo dudó ni un segundo, se tiró junto a él y comenzó a asistirlo.
“Se estaba ahogando”
El jugador del club quilmeño brindó detalles del momento en el que se olvidó de la competencia por completo para ayudar a un integrante del equipo contrario con riesgo de vida.
“Fue todo muy rápido, vi al jugador de ellos en el piso, con los ojos en blanco y con baba que salía de su boca; en ese momento atiné a agarrar el bucal y sacárselo de la boca porque se estaba ahogando”, contó el héroe de la jornada deportiva, que es oriundo de Plátanos y desde hace dos años juega en Old Georgian.
Segundos después, el médico del equipo local advirtió lo que ocurría y salió corriendo para asistir al jugador lastimado, que tardó varios minutos en recuperar el conocimiento.
Fuerte choque
El golpe que recibió Suárez habría sido producto de una jugada típica del rugby. “Por lo que supe después, fue un choque de su cabeza con la rodilla de un compañero mío”, contó Axel al Periódico El Progreso y, luego, agregó: “Fue muy rápido, pero perdió el conocimiento y me tiré para ayudarlo. Si bien me mordió un poco la mano, no me pasó nada; después comencé a gritarle al árbitro para que detuviera el partido”.
Afortunadamente, la asistencia eficaz y rápida de Axel y de los médicos hizo que el joven de Padua pudiera recuperar el conocimiento. Posteriormente se le practicaron exámenes de rutina y se le aplicó una sutura, encontrándose afortunadamente fuera de peligro.
En tanto que fuentes del club Padua indicaron a este medio que Suárez ingresó en protocolo para estos casos, por lo que será controlado día a día para descartar cualquier tipo de lesión.