La fábrica cerró en marzo por un caso de Covid y no volvió a abrir. Los trabajadores denunciaron irregularidades en el pago de salarios durante los últimos tres años y, para evitar el vaciamiento, “custodian” la maquinaria.
Trabajadores de la empresa metalúrgica Sempere S.A., de Quilmes Oeste, reclaman una deuda de más de 25 millones de pesos a los dueños de la fábrica, por irregularidades en el pago de salarios durante los últimos tres años, al tiempo que realizan una “custodia” de la maquinaria desde el mes de marzo, cuando la empresa cerró por un caso de coronavirus y no volvió a abrir, por lo que mantienen sospechas de un posible “vaciamiento” de la planta.
Se trata de la empresa ubicada en avenida Centenario y Andrade, que, según denunciaron, cerró hace 50 días y fue abandonada por sus propietarios, dejando una millonaria deuda con sus empleados. Son 17 los obreros damnificados, quienes aseguran que desde hace tres años venían sufriendo pagos irregulares, al punto de que la deuda salarial con cada uno de ellos rondaría aproximadamente en 1.500.000 pesos.
“Vivíamos con la esperanza de algún día cobrar las quincenas, recibiendo unos pesos por semana. El 25 de marzo nos dijeron que no fuéramos a trabajar por unos días, porque había un caso de Covid positivo; pero a partir de ahí no nos atendieron más, no cobramos más nada, no se presentaron más. Nuestra causa está en la Justicia, ya tenemos tres denuncias en el ministerio de Trabajo por falta de pago, pero sin ninguna respuesta”, señalaron los trabajadores en un comunicado.
La causa se tramita el Juzgado Nacional en lo Comercial N° 6, secretaría N° 12, y figura como “Sempere S.A. s/Concurso Preventivo”, expediente n° 24525/2018.
“Necesitamos ayuda, esto ya no se resiste más. Queremos trabajar, queremos alimentar a nuestras familias y tenemos muchas deudas generadas por la falta de cobro. Y encima no podemos cobrar ninguna ayuda del Estado, porque seguimos bajo relación de dependencia”, añadieron en el escrito.
Custodia
El temor ante un vaciamiento de la fábrica se hizo fuerte entre los obreros de la plata, quienes decidieron realizar un acampe en el lugar. Así lo indicó el delegado Miguel Cirielli, quien aseguró que permanecerán en el predio para “custodiar la maquinaria”.