Un grupo de vecinos intentó linchar al acusado, que se quitó la vida en su vivienda de Florencio Varela. La Justicia no encontró marcas en el cuerpo de la víctima.
Un hombre de 36 años, que había sido acusado de abuso sexual por su propia hija, se quitó la vida en su vivienda de Florencio Varela luego de que un grupo de vecinos intentara ingresar a la casa para lincharlo, un caso que generó verdadera controversia en el barrio cuando las pericias realizadas en el cuerpo de la presunta víctima dieron resultado negativo, lo que generó un debate sobre su culpabilidad o inocencia.
El caso salió a la luz cuando una mujer radicó una denuncia en la Comisaría 2da. de Florencio Varela, donde relató que, su vecina, de 15 años, le había contado que “al despertarse, al mediodía, fue abusada por su padre”.
La noticia corrió rápido por el vecindario y el acusado tuvo que atrincherarse en su inmueble, ubicado en inmediaciones de las calles Sperandio y Seguí, debido a que un grupo de vecinos pretendían hacer justicia por mano propia.
En medio de la tensión, efectivos policiales intervinieron para controlar a la turba vecinal y evitar agresiones. Asimismo, por orden del fiscal que intervenía en la causa, se mantuvieron en la puerta de la vivienda hasta que estuvieran los resultados de las pericias.
La menor de edad, por su parte, se encontraba en la sede del Cuerpo Médico de la Policía para realizarse el correspondiente Reconocimiento Médico Legal (RML), una pericia que permite detectar lesiones por abuso sexual. Sin embargo, la prueba arrojó resultado negativo.
“No se visualizaron marcas compatibles”, expresó uno de los investigadores en diálogo con El Quilmeño. No obstante, el vocero aclaró: “Que el resultado de la pericia diera negativo no significa que no haya existido un abuso sexual”.
Se apuñaló
Finalmente, el fiscal pidió que trasladaran al acusado a declarar. Al constatar que no respondía a los llamados a su puerta, los agentes policiales, en presencia de algunos integrantes de la familia, procedieron a ingresar a la casa. “Se había atrincherado y tuvieron que entrar por la fuerza”, agregó el investigador.
Al hacerse paso, los uniformados hallaron al hombre sin vida. “Tenía una herida punzocortante en el pecho y al lado de su cuerpo encontraron un arma blanca. También encontraron una carta en la misma habitación”.
En ese marco, se inició una causa judicial caratulada como “Suicidio”, en la que interviene la Unidad Funcional de Instrucción (UFI) Nº 5 de Florencio Varela, a cargo del fiscal Hernán Bustos Rivas. Además, continúa abierta una causa por “Abuso sexual”, que se tramita en la UFI Nº 8 de Quilmes, bajo las órdenes del doctor Alejandro Ruggeri.
Medidas de prueba
Si bien el imputado no podrá ser juzgado, los investigadores avanzan con las medidas de prueba para determinar si existió algún tipo de abuso sexual “simple”, para lo que serán clave las pericias psicológicas a la víctima.