Familiares y amigos se concentrarán mañana frente a los Tribunales locales para exigir la captura de otras cuatro personas, que también participaron del ataque.
Al cumplirse tres años del crimen de Juan Ledesma, el baterista de la banda Superuva asesinado a golpes y puñaladas a la salida de un recital que brindó en un bar de Quilmes, sus familiares y amigos marcharán mañana a la puerta de los Tribunales locales para exigir la captura de otras cuatros personas, que, según denunciaron, participaron del violento ataque junto a Cristian Genez, el único detenido por el hecho hasta el momento.
En febrero de 2018, el homicidio del músico sobrepasó los límites de la comunidad artística, ya que la noticia alcanzó gran repercusión en los medios de todo el país y generó gran conmoción.
A las pocas horas del crimen, la Policía detuvo a Genez, señalado por varios testigos como el autor material de las puñaladas que le costaron la vida a Ledesma, que fue agredido a la salida de Don Pedro Bar, ubicado en la avenida Calchaquí.
Desde entonces, parientes y allegados a la víctima insisten en que hubo varias personas que, junto al único imputado, participaron de la golpiza que derivó en la muerte del baterista. Y es por ello que anunciaron una movilización para mañana a la sede judicial de Quilmes, situada en las calles Yrigoyen y Videla, donde van a exigir la detención de otras cuatro personas que participaron del hecho.
Para que esto suceda, los familiares de Ledesma aseguran que se debe reabrir la causa y nombrar a un nuevo fiscal para que modifique la carátula de la causa. Eso será lo que reclamarán este jueves, alrededor de las 12, cuando los manifestantes se congreguen en la puerta de los Tribunales, tal como lo vienen haciendo hace tiempo.
Ataque “ideológico”
Genez es el único implicado en la causa, caratulada como “homicidio simple”. El mismo, se escapó y fue encontrado a la vera de una ruta camino a Gualeguaychú. El día anterior, a las 5 de la mañana, fue protagonista del sangriento crimen.
De acuerdo al expediente judicial, el baterista salía del bar Don Pedro de Quilmes Oeste tras tocar con la banda de punk Superuva. En la puerta, un integrante del grupo soporte esperaba para pedirles una foto a él y al cantante Daniel Checha Koscianiewicz. Además, había otras cinco personas que durante todo el recital les habían arrojado vasos.
Mientras los músicos se sacaban fotos, una botella pasó a centímetros de la cabeza de Koscianiewicz. Sin mediar palabra, Genez sacó una navaja y comenzó a increpar al cantante para que le devolviera la plata de las entradas. En ese momento, Ledesma se interpuso para defender a su amigo y recibió tres puñaladas, una de ellas en el corazón. Mientras estaba en el piso, fue pateado por los amigos del agresor y a los pocos minutos murió desangrado.
Se cree que ataque fue motivado por una cuestión ideológica, ya que Genez y sus amigos forman parte del grupo anarquista Los Obelos, señalado por poner bombas en la casa del juez Bonadío y en el mausoleo de Ramón Falcón. Según sus principios “anticapitalistas”, el grupo considera que una banda de punk rock no debería cobrar una entrada.